Tras diversos cambios de fecha, amagos de anulación, problemas de los argonautas para subir el barco y demás sustos, nos vemos obligados a subir a cañón el barco el Jueves para llegar a Gijón el viernes, con las condicioes que haya, buenas o malas. Como es obvio, el Argos va a la Kopa Amérika, si o si.
Jueves 14 de Mayo de 2009, 10.00 h.
Con cafés de por medio, Willy "Sir William" Blanco, Vicente "guachisnays" Viñuela, Luis " surfer" Bodelón y Ricardo "el resucitado" Beltrán, repasan los partes meteorológicos. El tema está complicado, noroeste fuerza 5-6 con rachas de 7 y role al norte en tre Ortegal y Estaca, acabando en Oeste fuerza 5-6 en el Cantábrico; mar del Noroeste con olas de 3-4 metros. Por experiencias previas, podemos tener el viento en la "napia" hasta Estaca, a la que queremos llegar de día.
Vamos allá, compramos víveres, incluído el jamón "de oferta" que nos recomienda la charcutera del Gadis después de preguntarnos si tenemos la "obra" cerca (parece que nos falta glamour, o mucho han mejorado los albañiles). Atención a este jamón, que será importante más adelante. Tras llenar depósitos de gasoil y agua en el Náutico, a las 12.30 horas doblamos el Dique de Abrigo y enfilamos Cabo Prior.
Luis a los mandos, 2 horas exactas a Prior, navegando a un descuartelar, con muy buena velocidad y la ola de través bastante molesta, pero no mayor de 2 metros. Una hora después dejamos al través la entrada a Cedeira, con las mismas condiciones; seguimos a un ritmo excelente.
Con Willy a los mandos alcanzamos Ortegal, navegando casi de través con 15-20 nudos de real y la ola yéndose poco a poco a la aleta, y ya de unos 3 metros, ¡ en canoa ¡. Sir William se lo va pasando en grande, el Argos cabalga y en 6 horas estamos en Estaca. Im-presionante.
Por supuesto Guachisnays prepara los ya clásicos gin tonics, para celebrar el paso y presumir otra vez que no hay nadie en España mas al Norte que nosotros bebiendo una KOPITA.
De Estaca rumbo 100º y a buscar Cabo Peñas, el viento yéndose al Oeste, El Argos de empopada y el mar por la aleta. Willy, lo clava: " sólo falta que me la .......". Cayendo la noche ya vemos la entrada de la ría de Ribadeo, dónde incluso alguno propone ir a cenar, pero no, vamos a correr. Una vez Willy nota aguas asturianas se arranca a cantar (¿esto ya ha pasado más veces, no?). Guachisnays incluso nos hace unos cafeses tras la cena. ¿Conoceis algún sitio dónde se pueda estar mejor que aqui en estos momentos?, no, claro que no.
Haciendo largos fuera y a tierra, para navegar más cómodos y veloces entramos en la noche, dónde la primera guardia es para Luis y Vicente. El viento, lejos de caer, se mantiene en 20 nudos, con rachas de 25-30 nudos. El Argos vuela a 8-9 nudos de velocidad con puntas bajando las olas de 11 y 12, una pasada. De vez en cuando alguna ola despistada entra de través y una de ellas rompe sobre el barco anegando la bañera y por poco tirándo a Luis al agua. La pronunciada escora despierta a los durmientes y aprovechamos para cambio de guardia.
Ricardo y Willy continuan a todo tren aprovechando el viento entablado en intensidad y dirección, embelesados viendo como el barco surfea las olas levantando grandes bigotes de espuma. Willy se va encontrando mal, el "jamón de oferta" le está causando estragos, y a las cinco de la mañana, un error de confianza provoca el lío.
Ricardo va a trasluchar y le dice a Willy que no se mueva y avise a los durmientes para la maniobra. Willy dice que no es "plan" despertatlos y trasluchan ellos. No recuperan lo suficiente la escota de mayor, que al pasar la botavara por crujía lleva mucho vuelo y engancha la rueda del timón, deformándola y soltando varios radios a pesar de los intentos de Ricardo por evitarlo, lesión de mano incluída.
Ya los cuatro arriba, el barco está sin gobierno varios minutos, mientras arriamos mayor y recomponemos provisionalmente la rueda que a partir de ahí va "en capilla". Seguimos sólo con el génova para no forzar el timón a unos buenos 7 nudos de velocidad y al amanecer estamos negociando Cabo Peñas. Si no es por el incidente y la reducción de trapo, veníamos "de record".
Ya sin más incidentes que el frío intenso del amanecer (Luis a los mandos desde el "sarao" llega congelado a Gijón) el Argos entra en el puerto de Gijón a las 8.05 de la mañana del Viernes, 19 horas y media después de su salida de Coruña, osea, una media aproximada de 8,5 nudos por hora.
En resumen, una singladura acojonante, sobretodo teniendo en cuenta que no excluíamos la posibilidad de pasarlas moradas y al final hemos venido "como tiros". Parece que el Argos tenía ganas de llegar a Gijón y viene con ganas de correr.......................................... Entramos de lleno en el Viernes, en el que se nos unirán Alvaro "dejademoverte" Sánchez y Caco "lamachine" Vilariño, para completar lo que será una tripulación para las historia, pero eso ya es el capítulo II.
Y para rematar una bonita cita:"Navegar es cojonudo, pero lo más bonito es llegar a puerto"
Jorge Thomas Huete, argonauta surrealista
1 comentario:
snif!!!!
que bonito...
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